La almohada ideal para dormir bien debe cumplir con varias características importantes:
- Soporte adecuado: Debe proporcionar un soporte adecuado para cabeza y cuello, evitando que se hundan demasiado en la almohada y manteniendo una posición neutral para la columna vertebral.
- Comodidad: La almohada debe ser lo suficientemente cómoda como para que te sientas relajado y puedas descansar bien durante toda la noche.
- Altura adecuada: La almohada debe mantener tu cabeza alineada con tu columna cuando estás acostado en posición habitual para dormir. No debe ser demasiado alta ni demasiado baja.
- Material: Elige un material de almohada que se adapte a tus preferencias. Los materiales comunes incluyen espuma viscoelástica, látex, plumas, fibras sintéticas y algodón.
- Durabilidad: Busca una almohada que mantenga su forma y soporte a lo largo del tiempo para garantizar un sueño consistente y cómodo.
- Hipoalergénica: Si eres propenso a alergias, considera una almohada hipoalergénica para evitar irritaciones.